La HBO y Aaron Sorkin, creador de Studio 60 y El ala oeste de la Casa Blanca, nos han alegrado (al menos a mí) este verano de sequía de series con el estreno de The Newsroom. Estos son los primeros ocho minutos. Si no os convencen, no sigáis viéndola.
¿Os imagináis que sucediera esto en nuestra televisión pública intervenida? Yo no.
miércoles, 6 de junio de 2012
Escribir es humano y corregir es divino. (Stephen King)
Creo que me voy a tatuar esta sentencia tan acertada para los momentos de desmotivación laboral, que últimamente son muchos.
miércoles, 30 de mayo de 2012
Anoche me despedí de Modern Family hasta la temporada que viene. Pero qué pena me da, sobre todo por Gloria, la mejor. La voy a echar de menos.
viernes, 25 de mayo de 2012
Paseándome por Tumblr, me he encontrado con esta foto. Podría parecer que se trata de una acumulación excesiva e innecesaria de mala suerte. Pero no. Es la cola para un casting de gatos negros, para la película Tales of Terror (1962).
Ayer, tras una sesión de paella y vinos, salió a relucir esta película, que todos los presentes habíamos visto recientemente. Entre las escenas destacadas, hubo unanimidad en cuánto nos había gustado esta:
Habría sido facilísimo que de esto hubiese resultado una escena tópica y evidente, de esas que dan vergüenza ajena. El peligro era enorme. Pero no. Con una sencillez tremenda, aquí se nos dice todo de los personajes, de lo que les ha pasado y lo que les va a pasar.
Por esta y otras razones, me ha gustado mucho "Shame". Bueno, también ha contribuido bastante, no lo voy a negar, la presencia de Michael Fassbender, a quien le sigo la pista de cerca en los últimos tiempos.
El otro día, zapeando de canal en canal, acabé recalando en esta escena, que ya había visto unas cuantas veces, y a la que siempre merece la pena volver. En ella, un veterano presentador de la televisión, despedido por la baja audiencia de su programa, encara la que piensa que será su última aparición en antena de una forma francamente liberadora:
Pertenece a Network. Un mundo implacable, película de Sidney Lumet de 1976, protagonizada por Faye Dunaway, William Holden, Peter Finch y Robert Duvall. Un lujazo, vamos.
Es curioso, pero casi cuarenta años después, seguimos igual. Repitan conmigo: "Estoy más que harto, y no quiero seguir soportándolo".
En estos tiempos en que multitud de «pensadores» (varones, todos ellos) nos dicen a nosotras, mujeres, qué es violencia estructural contra la mujer, qué hacer con nuestro cuerpo en caso de quedarnos embarazadas y cuándo sentirnos o no excluidas por un supuesto lenguaje sexista, se supone que debemos estar contentas y celebrar que hoy es nuestro día.
Como siempre, grande Forges, hoy en El País.
Estaré contenta el día en que dejen de tratarme con esa actitud paternalista como si fuera menor de edad (hace tiempo que dejó de ser el caso) o tuviera disminuidas mis facultades mentales (eso solo pasa en contadas ocasiones, cuando me tomo un par de gin tonics). Muchas gracias.
martes, 21 de febrero de 2012
Al final, fue Fanis quien me sacó de
dudas.
—Cómprate un Seat Ibiza —me
sugirió.
—¿Por qué?
—Por solidaridad entre los pobres.
Ahora los españoles y los portugueses tienen problemas, como
nosotros. Para los mercados financieros, somos los PIIGGS, los
«cerdos». Y cada cerdo debe ayudar a los demás, no hacerles la
pelota a los tiburones. Quisimos vivir como tiburones y ahora estamos
ahogándonos, porque los cerdos no saben nadar. Por eso tienes que
comprarte un Seat Ibiza.
Y me compré un Seat Ibiza.
Con el agua al cuello, Petros Márkaris
lunes, 6 de febrero de 2012
Caballeros del Zodiaco, contra las fuerzas demoníacas. Guardan siempre en su corazón coraje para vencer.
... cuando un traductor interpreta «becoming her own person» como «convertirse en su propia persona» tú tienes que andar espabilada y corregirlo como «hacerse dueña de sí misma». Porque luego, si alguien se queja, la culpa será tuya, nunca del que lo tradujo mal.
martes, 24 de enero de 2012
Ya está Edward impartiendo un poco de su sabiduría.
... la
más grave consecuencia de la aplicación de SOPA es que aquellas redes
que permiten la navegación anónima pasarían a estar vigiladas. Esto,
además de aniquilar el derecho a la intimidad, inhabilitaría cualquier
posible disidencia en los países donde Internet está bajo control
gubernamental como, por ejemplo, (ponga aquí su dictadura predilecta).
Si la ley SOPA sale adelante, Internet, el medio, pasaría a estar
vigilado y controlado por grandes corporaciones como Microsoft, Apple,
Adobe, las discográficas y las majors de Hollywood. La internet
abierta, libre y un tanto caótica que conocemos daría paso a una
ciertamente mucho más estricta y ordenada.
-Hay
una frase que reza así -dijo
Komatsu-: «Se considera que toda arte,
todo anhelo, así como cualquier acto y búsqueda aspiran a alguna forma de bien.
Por consiguiente, se puede determinar correctamente que el bien es aquello a lo
que todas las cosas aspiran».
-¿Qué es eso?
-Aristóteles. Ética a Nicómaco.
¿Has leído algo de Aristóteles?
Sigo con la lectura de 1Q84, que me está haciendo reconciliarme con Murakami (gracias, Mara, por la recomendación). Voy lenta, hace tiempo que no logro leerme un libro del tirón, pero la vida moderna es lo que tiene. Y a cada poco me encuentro con frases que te dan ganas de tatuarte a modo de recordatorio. Como esta, que me hizo acordarme de lo que sufrí con Aristóteles en la universidad y darme cuenta de lo necesario que sería que aquellos que gobiernan este mundo se leyeran su ética un par de veces al año. Pues eso. Que está el mundo muy mal. Y yo mañana me voy a Londres a fundir la Visa en las rebajas y, con la excusa, darme un paseo por la tierra que vio nacer el neoliberalismo, razón de todos nuestros males. Porque si todo se va a ir a la mierda en 2012 como pronosticaron los mayas, al menos que me pille bien vestida.
martes, 10 de enero de 2012
Imagen robada del Tumblr de Cuando haces Pop.
Estos primeros días de 2012 se está haciendo muy duro ir a trabajar por las mañanas. Y el estado de pereza no acaba de desaparecer a lo largo de la jornada. Así que disculpen las molestias, pero de momento no tengo mucho más que añadir.